Harina de castaña
La harina de castaña es un ingrediente tradicional y auténtico, especialmente apreciado por su sabor dulce y rico, típico de las castañas de montaña.
Es una harina naturalmente sin gluten, de color ámbar y sabor envolvente, perfecta para dar un toque rústico y genuino a las recetas.
Usos de la harina de castaña
La harina de castañas es sumamente versátil en la cocina, apta tanto para platos dulces como salados:
Postres tradicionales: con él se preparan bizcochos suaves, tartas, galletas rústicas y el famoso castagnaccio, un postre sencillo pero rico en sabor.
Pan y focaccia: el pan con harina de castaña tiene una consistencia única, ligeramente dulce y apto para acompañar tanto quesos como embutidos.
Pasta y ñoquis: para platos originales como los ñoquis de castañas, o los tallarines y raviolis, que adquieren un sabor inconfundible.
Sopas y polenta: la harina de castañas también se utiliza para hacer más cremosas las sopas de otoño y crear una polenta de castañas con un sabor dulce y envolvente.
Ideal para los amantes de las tradiciones y la cocina auténtica, la harina de castañas realza las recetas de otoño e invierno con sabores ricos y cálidos, transportando a quien la prueba directamente a la atmósfera de bosques y montañas.